El Comité de Asuntos Rurales del Instituto de la Ingeniería de España organiza una jornada sobre »El nuevo reto de los proyectos de absorción de CO2, emisiones CO2, mercado de emisiones y repercusión en el mundo rural» desde Molina de Aragón (Guadalajara), el próximo22 de septiembre a las 18:00 horas y se retransmitirá en directo.
Las tendencias regulatorias europeas demanda un modelo de desarrollo más sostenible, basado en la acción por el clima.
Dado que el mundo agrario (agricultura, ganadería y explotación forestal) es responsable de casi ⅓ de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, este sector tiene ahora la oportunidad de ser una parte realmente importante de la solución. Adoptando una serie de prácticas regenerativas, podemos convertir el suelo en sumideros naturales de carbono, extrayendo carbono de la atmósfera y almacenándolo en los suelos. Sin embargo, la transición de los agricultores y ganaderos a las prácticas de agricultura regenerativa tiene costes.
Esta jornada ofrece al mundo rural los sistemas de recompensa económica del mundo para incentivar a las personas relacionadas con los cultivos herbáceos, cultivos leñosos y cultivos forestales en su camino hacia la agricultura sostenible del carbono.
No obstante, los beneficios van más allá de incentivar económicamente a los agricultores a través de los mercados de carbono. Hay una plétora de co-beneficios de la agricultura regenerativa que crean resiliencia climática: mayor retención de agua, más biodiversidad y reducción de la erosión, por nombrar algunos.
Para el mundo rural, se trata de todo un reto, no solo adaptarse a la velocidad que impone Europa en estos aspectos, sino con el reto de incrementar las producciones para mantener la seguridad alimentaria global. Se tratará de resolver las dudas sobre adicionalidad, monitoreo, actores participantes, garantías hacia el mundo rural y el mercado, o las posibles regulaciones que aparecerán próximamente y que mantienen la incertidumbre del agricultor y las empresas sobre este tipo de proyecto.
El caso de los cultivos herbáceos y leñosos los agricultores podrán tener acceso a una fuente de ingresos adicional a través de certificados de carbono que se obtienen realizando prácticas agrícolas respetuosas con el medio ambiente, como la agricultura regenerativa. El agricultor tiene el control y derecho sobre sus certificados de carbono y él decide qué hacer con ellos (venderlos por dinero o guardarlos para compensar sus propias emisiones). Desde la perspectiva forestal se trata de ver cómo la gestión de los montes realizada por los selvicultores puede contribuir a aumentar la capacidad de sumidero de carbono de las masas forestales y ser un estímulo para evitar su abandono a través de proyectos de generación de créditos de carbono.
Al día siguiente, para aquellos asistentes que pernocten en la zona, se ha programado una visita a la ruta Fósil muy cercana a Molina de Aragón, haciendo diferentes paradas y explicando la geología del triásico, con icnitas de proto dinosaurio y fósiles vegetales, con paradas para contemplar pinturas rupestres y por último el bosque fósil en posición de vida.